Si eres nuevo en el mundo de la inversión, deberías leer esto.
Todos los años, veo a nuevos inversores que se interesan por aprender
a invertir sus ahorros, cometiendo los mismos errores que otros
principiantes antes que ellos, han cometido una y otra vez.
Una de las primeras cosas en las que deberías centrarte si
eres nuevo en esto de las inversiones, es en evitar los errores típicos. Y no,
en pretender ser un genio de las finanzas desde el minuto uno.
A continuación te resumo los 10 errores más comunes del inversor novel
1. Mentalidad de corto plazo
Los nuevos inversores suelen caer fácilmente en la
aleatoriedad del mercado a corto plazo.
No es difícil que por puro azar, compres unas acciones y
ganes dinero una semana. Pero estas dejando los resultados de tus inversiones a
la suerte. Por el contrario, hay quienes no tienen la suerte de cara, y pierden
dinero en sus primeras operaciones. Creyendo que esto de la bolsa y los
mercados no es para ellos.
Solo los inversores experimentados saben que la rentabilidad de sus inversiones se debe medir con el transcurso de los años. No de unos pocos días. Pero lleva tiempo (y a veces, cuesta mucho dinero) llegar a entender esto.
2. Invertir todo en una o unas pocas acciones
Los nuevos inversores sólo suelen pensar en las ganancias y
no en lo que les puede pasar si se equivocan. Caen en el exceso de confianza fácilmente
y ponen casi todo su dinero en una o una pocas acciones.
Los inversores experimentados y profesionales, diversifican.
Porque saben que el futuro es incierto. Y que ninguna empresa por grande que
sea, está libre de sufrir algún desastre.
3. No hacer ninguna
investigación o análisis
Los nuevos inversores, suelen comprar acciones sin hacer
ningún análisis previo.
Muchos, no tienen ni idea de cómo se hace eso. Algunos creen
que basta con cacharrear un poco en internet y leer foros de inversiones. Si
hay alguno que por casualidad descubre el esfuerzo que implica hacer un análisis
fundamental y el tiempo que conlleva, lo desprecian completamente. El inversor
novato confía en las ideas de inversión que lee en internet y en las
recomendaciones del cuñado de turno, para ganar dinero fácil y rápido.
Lo cierto es que si no haces un buen análisis previo por ti
mismo, es imposible que puedas tener convicción. Y sin convicción, no vas a
tener la fortaleza que se necesita para mantener esas acciones en cartera,
cuando llegue algún inevitable traspié en los mercados a lo largo del tiempo. Si
no sabes porque estás invirtiendo en una empresa ni cuál puede ser su rango de
valoración intrínseca, estás más perdido que un pulpo en un garaje. Y
nuevamente en manos del azar y de la angustia de tus emociones, al no ser capaz
de controlar la situación, ni entender lo que está pasando.
4. Mirar demasiado las
cotizaciones y nada los negocios
Muchos inversores novatos, pierden un montón de tiempo a
diario, siguiendo las cotizaciones de las acciones y consultando los precios
varias veces al día. Jamás se plantean investigar de que van los negocios de
las empresas en las que invierten, cuáles son sus márgenes, si tienen alguna
amenaza o como ganan dinero. Sólo miran los gráficos.
Los inversores profesionales, saben que tienen que estudiar
con detállela información periódica y las publicaciones de resultados, para
reajustar las expectativas de las acciones que les interesan y recalcular su
valor intrínseco.
5. Vender las inversiones
ganadoras y comprar más de las perdedoras
A muchos inversores primerizos, les queman las ganancias y están
ansiosos por vender, en cuanto ven que ganan un poco de dinero. Y sin embargo,
doblan la apuesta varias veces, promediando a la baja en las acciones que
tienen en cartera y que no paran de bajar.
Los inversores con experiencia saben, que justamente hay que
hacer lo contrario. Mantener a largo plazo e incluso comprar más acciones, de
aquellos negocios en los que los beneficios y las expectativas futuras, no
paran de mejorar. Y vender las acciones de los negocios ruinosos, con
problemas, etc.
6 . Exceso de confianza
Otro error típico, es que algunos inversores noveles creen
que en poco tiempo ya han aprendido todo lo que necesitan saber para invertir
con éxito.
Los inversores con experiencia saben, que cuanto más
aprenden, más se dan cuenta de lo que no saben y de lo mucho que les falta para
convertirse en buenos inversores.
Esta situación se describe muy bien por lo que se conoce como
el efecto Dunning-Kruger.
7. No tener método y
seguir al rebaño
Muchos inversores, novatos y no tan principiantes, no tienen
un proceso inversor e invierten sin más criterio, que el de seguir aquellas
inversiones calientes o de moda, que se vuelven populares. Prestan atención en
aquellas sobre las que la gente empieza a hablar a menudo.
El inversor experto trata de diseñar e ir mejorando su
proceso inversor. Tratando de ampliar poco a poco su círculo de confianza, sin
prestar demasiada atención, a las inversiones que se mencionan constantemente
en las noticias y los anuncios sobre inversiones.
8. Usar endeudamiento o
productos apalancados para invertir
A los nuevos inversores les suelen a traer los atajos para
ganar mucho dinero en poco tiempo. Cuando descubren que con un ETF apalancado,
un contrato por diferencias o con futuros y opciones, pueden multiplicar el
resultado de sus apuestas, van de cabeza. Pero ese camino, es sólo una receta
para el desastre.
El inversor medio e incluso el profesional, no necesita
endeudarse ni usas productos financieros sofisticados para ganar dinero con sus
inversiones.
9. Hacer demasiadas
operaciones
Muchos inversores que empiezan a mover sus ahorros, creen que
hay que operar mucho si quieren ganar dinero. Cuando realmente, el único que
gana haciendo un número elevado de compraventas, es el bróker.
Precisamente por el enfoque a un horizonte temporal de corto plazo,
se tiende a operar demasiado. Lo que se traduce en elevados costes de
transacción, que a la larga, merma el resultado agregado de la cartera de
inversión.
Los buenos inversores intentan rotar al mínimo su cartera de
inversión y mantener sus posiciones el mayor tiempo posible para que puedan
crecer.
10. No darle importancia a
las comisiones y costes de transacción
Los inversores novatos no suelen reparar en las comisiones.
Algunos piensan que no tienen importancia. Si la rentabilidad que ofrece un
fondo de inversión o una acción ganadora de crecimiento compensa, no importa lo
que haya que pagar por invertir.
Pero los inversores experimentados, saben que cada euro cuenta.
Que menos
costes, es más rentabilidad que se queda en tu bolsillo.
También te puede interesar:
Publicar un comentario
Participa en la conversación y déjame un comentario.