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Trucos que ayudan a preparar el bolsillo navideño



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A medida que se aproxima velozmente el, para muchos, ansiado periodo navideño, y siendo testigos de la difícil conjetura económica por la que atraviesa el país desde hace ya no pocos años, se hace si cabe aún más imprescindible establecer un control personal en términos monetarios, a fin de afrontar estas largas fiestas con un buen colchón que permita disfrutarlas como se merece, sin pasar excesivos apuros por el bolsillo. 

Para ello, si bien como dice el popular refranero nacional, “cada maestrillo tiene su librillo”, y administra su dinero de la forma que mejor y más oportunamente cree, les vamos a enumerar algunos truquillos que con casi total seguridad serán de ayuda a más de uno/a para controlar el gasto en este tramo previo a las copiosas celebraciones de Navidad. 

Para aquellas personas que en estos meses no disponen del dinero necesario, pero que sin embargo en Navidad o en los meses venideros a esta época estival van a recibir un dinero con el que no cuentan generalmente, como es el caso de la paga extra de Navidad, los créditos rápidos al instante sonuna solución para ellos, ya que pueden disponer fácilmente de dinero al instante, y recuperarlo posteriormente. Por esta cuestión principalmente, los créditos rápidos son una alternativa bastante recurrida en la actualidad por amplios sectores poblacionales. 

Para reducir el gasto, supone una gran ayuda educarse al respecto. Es decir, tomarse cierto tiempo para estudiar las finanzas personales. Cada semana, dedique algunas horas a administrar sus finanzas personales, así como a leer libros, revistas o sitios web de finanzas. Cuanto más sepa acerca de sus propias finanzas, más grande será la confianza que tendrá en sí mismo para administrar el dinero a medio y largo plazo. 

Automatizar las finanzas también es otra vía bastante útil. Se pueden usar transferencias en línea automáticas, o bien hacer los pagos en cuentas por internet cada mensualidad. De esta forma, se reducirá el estrés derivado de pagar las facturas a tiempo, y por cargos extra o intereses. 

Por último, citamos un factor bastante lógico, pero al cual no se dota de la importancia necesaria, como es la creación de un colchón personal económico de seguridad.  

Establecer este “bote salvavidas” permite emplear el dinero si es necesario para acometer gastos no planificados, así como emergencias que pudiesen sobrevenir en la realidad cotidiana, en lugar de incrementar la deuda o invertir a largo plazo. 

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