Recomendaciones para cambiar de banco

¿Estas harto de que te cobren comisiones? ¿Ya no está en tu oficina la persona con la que tenías confianza? ¿Sientes que te tratan como un número en tu banco? ¿Te han colocado algún producto financiero del que no te lo contaron todo?

Si es así, seguro que has pensado cambiar de banco o puede que ya lo hayas hecho. Sin embargo, la realidad es son pocos los que pasan a la acción. Lo normal suele ser quejarse y no hacer nada.

O lo que es peor, quejarse y poner excusas para cambiar de banco. Que es lo que suele hacer la mayoría de la gente de más de 40 años. Que estadísticamente son los más perezosos a cambiar de entidad. 

Claro que hay cambios y cambios. No es lo mismo querer cambiar de banco la hipoteca, que cambiar la domiciliación de la nómina o los ahorros. Hay ciertos grados de implicación en según qué cosas, que por mucho que uno quiera, no te puedes mover de entidad. 

De todos modos, para que no te quedes en la intención, te voy a dar algunas recomendaciones para cambiar de banco si estas descontento y aun no has hecho nada para solucionarlo. 

Te lo voy a  decir bien claro, si sigues aguantando comisiones hasta por respirar, colas interminables, que te atiendan como si fueses basura y que “te la metan doblada” con algún producto, es porque tú quieres. Así que no te quejes. 

Soluciones hay. Y si luego te vas a echar para atrás, mejor no digas nada. Hay una serie de excusas comunes que se suelen poner, para posponer la decisión de cambiar de banco y que se suelen repetir independientemente de las circunstancias y edades. 

Que si va ser mucho lío cambiar todas las domiciliaciones, que si está fulanito en el banco que es amigo tuyo, que como llevas toda la vida a ver que van a decir, que es que tienes una oficina debajo de casa, que como tienes hipoteca no puedes cambiar de banco u otros motivo sentimentales, como que es la primera cuenta que abriste de niño o que llevas toda la vida con tal banco. 

Todo eso son bobadas. Y si te la están liando y no te cambias de banco es porque no te da la gana. Te recuerdo que el dinero es tuyo y puedes hacer con ello lo que te de la gana. No le tengas miedo al qué dirán, si no estás contento y te vas, al menos les das un toque de atención.

Si me dijeses que te has encontrado con un asesor que está súper preparado, te soluciona todos los problemas financieros, que te trata estupendamente, que te dedica tiempo y atiende a las mil maravillas, podría entender que no quieras cambiar de banco y asumas las comisiones o lo que sea. 

Para todos los demás casos, tienes soluciones bastante cómodas. A parte de que tienes mucha información valiosa en internet, para contrastar lo que te dicen en el banco, tienes un montón de bancos online, que han nacido en la última década y que son bastante transparentes. 

Si eres joven y te manejas bien con las nuevas tecnologías, te puedes cambiar de banco a golpe de ratón desde el ordenador de tu casa. 

Si peinas canas, tendrás que gastar un poco de suela de zapato y buscar una entidad y un empleado que te dé lo que estás buscando. 

Como se suele decir, “para que no vayas de Guatemala a guatapeor”, te diré que ningún banco te puede garantizar de por vida el cero comisiones en todo. Eso puede cambiar en cualquier momento a criterio discrecional de banco, con la única obligación de informar de la modificación con dos meses de antelación. Ni siquiera es necesario que la comunicación sea personalizada. Con que se publique en el tablón de anuncios, en prensa o Banco de España vale. 

Te lo digo porque hay bastante crispación últimamente con eso de las fusiones bancarias y los cambios de condiciones. No te equivoques. Que en su día contratases una cuenta sin comisiones o las condiciones que fuesen, las pueden cambiar cuando les venga en gana. Y si no te gustan te vas o te quedas. Con la pataleta en la oficina no vas a conseguir nada. 

Si estás atado por la hipoteca y no quieres cambiar la hipoteca de banco, también puedes pasar todas tus operaciones del día a día a otra entidad y compaginar ambas cuentas. En el caso de tener que mover únicamente la nómina o los ahorros, la operación es más sencilla. Ten mucho cuidado con las ofertas promocionales y los compromisos de permanencia. Sea como fuere, que no te preocupen las domiciliaciones a la hora de decidir cambiar de banco. La mayoría de entidades te lo suelen hacer gratis, llevándoles una copia de los recibos. 

Espera un tiempo prudencial, hasta que verifiques que se han traspasado todos los cargos a la nueva cuenta y después, cancela la anterior cuenta si quieres evitar gastos. Dejar a cero la cuenta y no cancelarla al cambiar de banco, es una tontería que suele hacer mucha gente y que sólo te generará problemas. En casi todas las entidades te cargaran las comisiones de mantenimiento, con su correspondiente comisión de reclamación de posiciones deudoras y los intereses deudores correspondientes por el descubierto. 

Y aunque digas eso de, “pues no lo pienso pagar”, acabarás en el registro de impagados. Y como tengas que pedir financiación para algo, olvídate de que te lo concedan. 

Cambiar de banco es posible. Pero lo que realmente tienes que hacer, es cambiar de mentalidad. Déjate de sentimentalismos y cuando no estés contento vete a otro banco. Tampoco te digo que seas un subastero. Valora la atención y el trato, no sólo el precio. Es la mejor medida de presión que puedes hacerle a la banca para que cambie su forma de actuar y que se preocupe más de sus clientes. 

También te puede interesar:

• Cómo evitar el pago de comisiones de mantenimiento por una cuenta asociada a un depósito
• 6 consejos para ahorrar dinero
• Mejores tarjetas con descuento en carburantes 2012