Del
tipo de inversión que te voy hablar a continuación se le conoce de muchas
maneras. Gestión pasiva, gestión indexada, inversión en índices, inversión
pasiva, inversión boglehead, etc. Puedes quedarte con el término que más te
guste, mi preferido es el que aparece en el título: Inversión Indexada. Es como me voy a referir a ella a partir de
ahora.
Se
trata de una estrategia de inversión que cualquier persona que no sepa dónde
invertir los ahorros puede poner en marcha sin apenas dificultad. Es la que
elegí yo para invertir los míos hace unos años tras sufrir algún que otro
batacazo en la Bolsa.
Mi
objetivo con este artículo es explicarte de manera breve en qué consiste la
inversión indexada. O por lo menos, que te pueda servir como introducción a esta
efectiva (aunque aburrida, te aviso) forma de inversión.
¿Qué es la inversión indexada?
Invertir
se puede hacer de dos formas: siendo activo o siendo pasivo.
Por
una parte están los inversores activos,
que son los que emplean su conocimiento y habilidades para especular. La inmensa mayoría
de los que participan en los mercados siguen estrategias de este tipo con la
intención de encontrar las mejores oportunidades de inversión, por cierto, algunas
de las más absurdas. Pero todas ellas con un objetivo en común: conseguir
rentabilidades superiores a las que ofrece el mercado. Por ejemplo, algunos invierten
seleccionando acciones de empresas que cotizan con descuento porque consideran
que sus negocios gozan de alguna ventaja competitiva. Y otros invierten echando
mano de gráficos de cotizaciones trazando sobre ellos infinidad de líneas de tendencia
para anticiparse a los movimientos del mercado.
Y
por otra parte están los inversores
pasivos, que son más de comprar y mantener sin complicarse la vida.
Los
fondos indexados son unas de las
herramientas que los inversores pasivos tienen para llevar a cabo sus inversiones.
Son fondos de inversión que replican la evolución de un índice bursátil y los hay de todas las formas y tamaños posibles. Existen fondos indexados que imitan la evolución de mercados de renta variable, de renta fija…,
y pueden ser de un país en concreto o de una zona geográfica más global, pero todos
tienen la misión de igualar las
rentabilidades que ofrece un mercado.
Cuando
un inversor pasivo invierte utilizando fondos indexados entonces surge la inversión indexada.
La inversión indexada es “buena”
Invertir
con fondos indexados y conformarse con
la rentabilidad que ofrece el mercado suele ser una decisión inteligente.
Por
ejemplo, conformarse con la rentabilidad que ha brindado el mercado de renta
variable de EEUU a lo largo de los últimos 100 años, una rentabilidad anualizada cercana al 10 % (con reinversión de dividendos
y sin tener en cuenta la inflación).
Si
nos vamos a periodos de tiempo más razonables para una inversión de medio-largo plazo, como por
ejemplo de 10 años, no hay mucha diferencia. En los últimos 100 años la rentabilidad
media anualizada de todos los periodos posibles de 10 años también está cerca del
10%. Aunque dependiendo del periodo analizado la rentabilidad puede ser más
o menos (solo hay tres periodos con rentabilidad negativa), pero por lo general,
la rentabilidad anualizada que más se repite está entre el 8% y el 10%.
¿Pero estas rentabilidades entre el 8%
y el 10% son buenas o malas?
Pues
depende.
Si
crees que tienes la habilidad (o conoces
alguno que la tenga) para batir al mercado de forma consistente quizás te puedan
parecer mediocres. Pero eso hay que verlo. Son muy pocos los que lo consiguen,
y entre ellos, solo una minoría lo hace de manera consistente (con muy pocas excepciones). Y dar con alguno de éstos es igual de
difícil que acertar con la próxima Apple.
En
el último periodo de 10 años, el 90 % de los gestores de fondos de inversión que invierten de forma activa han quedado por debajo de sus índices de referencia. Dicho de otra manera ¡solo
el 10 % de inversores de fondos han conseguido rentabilidades superiores a las
que ofrece el mercado!
Si
profesionales que cuentan con mucha experiencia a sus espaldas y con acceso a
las mejores herramientas de inversión no pueden batir al mercado, imagina cual
será el resultado de un particular que va al mercado con la intención de
especular.
La inversión indexada, que simplemente
busca obtener las mismas rentabilidades del mercado, es más efectiva que la mayoría de estrategias de inversión activa.
La inversión indexada es “bonita”
Invertir
con fondos indexados es sinónimo de invertir
en mercados enteros, mercados con una gran cantidad de empresas que venden
productos que nosotros mismos consumimos.
Echa
un vistazo a las primeras posiciones de tres de los índices bursátiles de renta
variable más importantes que existen, los cuales también son referencia para
muchos fondos de inversión de gestión activa.
Estoy
seguro que conoces a muchas de ellas, ¿verdad?
Pues
invertircon fondos indexados es invertir en estas empresas y en muchísimas más.
Significa invertir en la economía globalizada de la que formamos parte y aprovecharse
del desarrollo y el progreso económico que siempre se da a largo plazo. Por un
lado compramos sus productos, por otro tenemos la oportunidad de recibir parte de
sus beneficios.
¿No
te parece fantástico este hecho? A mí sí.
La inversión indexada es “barata”
Una
de las principales razones por las que la inversión indexada es efectiva es
porque tiene un coste muy bajo en
comparación con otros tipos de inversión.
Los
fondos indexados tienen un objetivo muy simple, la de imitar a un mercado en
concreto. Detrás de ellos no hay ningún equipo de gestores ni de analistas
recibiendo cuantiosos salarios por encontrar las mejores oportunidades de
inversión. Esta simplicidad se traduce
en unos costes bajos (son fondos que tienen un coste alrededor de un 0,30 %
anual). Además, sus costes de operativa e impuestos son bastantes menores que
los de gestión activa (fondos con costes entre el 1,50 % y el 2,00 % anual) porque
la rotación de sus carteras también es muchísimo más baja.
Y
cuando se trata de invertir hay que tener el coste muy presente. Este dato, al que apenas se le da
importancia, es lo que mejor puede predecir la rentabilidad de una inversión. Ni
las rentabilidades pasadas ni la bola de Rappel. Mantener los gastos a raya es lo que hace que una inversión buena sea
bastante mejor, o que una inversión mala no sea tan mala.
Como
dice John Bogle, todo lo que pagas de más
invirtiendo, es rentabilidad que no obtendrás en el futuro.
… pero la inversión indexada es ante
todo sencilla
La
clave para tener éxito invirtiendo es tener un plan bien definido. Acudir al
mercado sin él, es ser carne de cañón. Y aun teniendo uno, si la estrategia de
inversión es muy compleja, casi que también.
La
inversión indexada, que ni es enrevesada ni requiere esfuerzo, facilita mucho
la tarea de crear uno, y sobre todo seguirlo, que es donde fallan la mayoría de
inversores.
Lo
más “difícil” de este tipo de inversión son las decisiones que se han de tomar para
sentar las bases del plan.
La
primera y la más importante es elegir los activos en los que invertir. La decisión de cómo repartir los ahorros entre
la renta variable y la renta fija marcará el porvenir de la cartera. Cuanto más
inclinada esté hacia la renta variable, se podrán conseguir mejores
rentabilidades con el paso del tiempo, pero también serán más volátiles (la posibilidad
de sufrir con los grandes mercados bajistas siempre estará presente...) Y cuanto más parte de renta
fija tenga la cartera, todo lo contrario, las rentabilidades no serán tan altas
pero serán más estables. Digamos que la renta variable es como el acelerador y la renta fija el freno.
Elegir los mercados de renta variable y renta fija, y cuánto dinero destinar a
cada uno, es otra de las decisiones importantes en el proceso de creación una cartera de inversión indexada. Dentro
de cada activo es recomendable diversificar, sobre todo si ocupan una parte importante de la
cartera. Los fondos indexados son perfectos para este encargo, fondos de por sí muy diversificados. Según que épocas unos
mercados se comportan mejor que otros, y en otras, al revés. Las rentabilidades
se acaban compensando y esto hará que la rentabilidad global de la cartera no sufra
variaciones muy bruscas.
Antes de empezar a invertir también es importante establecer cuándo y cómo reajustar la cartera. Con el paso del tiempo su distribución irá cambiando.
Si se aleja mucho de la inicial es necesario volver a ella traspasando dinero
de unos fondos a otros. Esta técnica se conoce como rebalanceo de la cartera y es útil para seguir el plan de inversión de manera consistente y
hacer una gestión pasiva de la cartera sin preocupaciones, sobre todo cuando
los mercados se muevan hacia arriba o hacia abajo.
Soy Sergio Yuste, autor del blog sobre inversiones GestionPasiva.com, asesor financiero europeo EFPA, apasionado de los mercados financieros y es un placer haber escrito hoy para ti como autor invitado. Comparto mis conocimientos con todo aquel que quiera aprender a invertir en bolsa desde cero, rentabilizar los ahorros, mejorar el resultado de sus inversiones o planificar la jubilación. Quiero ayudarte a conseguir la libertad financiera y acercarte a tus sueños.
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Yo ahora invierto en acciones del ibex,pero para el extranjero cojere un fondo índice para no complicarme la vida.
ResponderEliminarSaludos
Hola Jose María.
EliminarCoincido contigo en que es una buena idea, especialmente para invertir sin complicaciones en mercados que no conocemos demasiado.
Pero una combinación entre invesión indexada y gestión activa de calidad, como puede ser la gestión value, es desde mi punto de vista la cartera ideal tanto para el extranjero como para mercado doméstico.
Un saludo.
Hola Sergio,
ResponderEliminaracabo de leer el libros "Cómo invertir en fondos de inversión con sentido común" de J. C. Bogle y he decidido olvidarme de comprar y vender las acciones que me recomienda mi banco, para pasar a la inversión pasiva. He visto tu fantástico blog y veo que tú eres uno de los defensores de este prometedor sistema de ahorro.
También veo que tus fondos los tienes en Renta 4.
Te agradecería que me dijeras si además del TER que indicas hay algún otro gasto adicional como custodia, mantenimiento de cuentas, cargos por operaciones, etc...
Con tu permiso, voy a leer más en detalle y tranquilamente todo tu blog.
Gracias por todo.
Hola Luis,
ResponderEliminarEn Renta 4, si inviertes únicamente con fondos no tienes ningún gasto más. Lo que pueda ganar R4 con tu inversión va incluida en los TER de los fondos (son las famosas retrocesiones que consiste en que las gestoras de los mismos pagan al intermediario, en este caso R4).
Un saludo y gracias por comentar :)
Buenas tardes Sergio.
ResponderEliminarTengo algún ETF que replica a Índices (Ibex35 y Eurostoxx 50 en concreto). Como bien dices son formas de inversión pasiva y sencillas, con comisiones por tanto muy bajas.
Me gustaría saber tu opinión de por que teniendo este canal de inversión, los bancos no cesan de ofrecer F.I. indexados si las comisiones son mucho más altas. La única explicación que me ofrecen ellos es que dicen que la gestión es activa (me imagino que por la variabilidad de la cartera dentro del Índice), y el hecho de diferir los impuestos.
Me gustaría saber tu opinión por favor.
Un saludo,
Hola,
ResponderEliminarLos bancos no suelen ofrecer fondos indexados, además, los buenos fondos indexados no suelen tener las comisiones muy altas (son muy parecidos a los ETF).
Quizás te hayas confundido con los fondos de gestión activa que ofrecen los bancos (éstos si que tienen las comisiones muy altas).
Un saludo,
Hola amigo sergio un placer. Mi nombre es pedro navarro .tu blog es super excelente la forma en que diversificas el contenido .no tengo ninguna experiencia en los mercados , pero me gustaria irme formando para hacer mis futuras inversiones y me gustaria contar con tu sabiduria en este tema tan complejo y hermoso .muchas gracias de antemano
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