En principio, a mayor formación, mayores posibilidades de
encontrar empleo. Pero no todo es estudiar en la universidad. La clave es tener
la preparación requerida en el mercado o sector en el que uno quiere emplearse.
En este caso, la cuestión que muchos parados se hacen es, que puedo estudiar para trabajar en España.
Y es que nuestro país tiene unas peculiaridades muy
concretas. Así como una radiografía del empleo y del perfil de desempleado muy
particular.
Somos líderes europeos en desempleo juvenil y a su vez acumulamos un gran porcentaje de
parados de larga duración de más de 40 años, que el mercado tampoco es capaz de
absorber.
Si el sector de empresa demanda titulados de la rama
económicas y administración de empresas, pero al final terminan desempeñando
puestos de trabajo por debajo de su nivel formativo ¿por qué todo el mundo
sigue queriendo hacer ADE en la universidad en lugar de un curso administración a distancia?
Si los titulados universitarios terminan subempleados o en
sectores que no son los suyos en caso de que encuentren un empleo ¿qué puedes estudiar para trabajar?
Si quieres que algo cambie no hagas siempre lo mismo. Hay
suficiente base histórica como para contrastar que hay una clara descorrelación
entre lo que el mercado laboral demanda y lo que los centros educativos “fabrican”.
Eso debería bastar para darle una pista a quien no sabe qué camino elegir.
Es verdad que los padres de las generaciones nacidas en
democracia se han desvivido por que sus hijos tuviesen una vida mejor que la de
ellos, y a poder ser que fueran a la universidad. El problema es, que de la
misma forma que se ha querido socializar los estudios superiores rebajando el
nivel de exigencia, se ha mantenido la idea preexistente a la democracia, de
que llegar a ser funcionario es el culmen optimo a la etapa universitaria. Y
esto ya no puede ser.
Hay que cambiar el paradigma educativo de nuestro país, si
queremos dejar de ser líderes en paro juvenil.
Y ojo, que no necesariamente la solución a los problemas de nuestros
jóvenes está fuera de nuestras fronteras. Pero sí que es cierto que o nos
abrimos educativamente a una orientación hacia la demanda exterior y el dinero
que viene de fuera o no vamos a conseguir resolver el problema laboral que
tenemos.
Con esto quiero decir si sabemos que un título universitario
ya no es garantía de un trabajo mínimamente aceptable, quizá haya que plantearse
invertir esos preciados 4 o 6 años de juventud en estudiar idiomas. Siendo el
inglés un must inevitable, el alemán
recomendable y el chino mandarín un diferenciador con proyección de futuro
incontestable. No te olvides del portugués y por qué no del japonés. Son
garantía de empleo, créeme.
Y no hay por qué hacerlo al modo tradicional. Estamos en el
siglo XXI. Las nuevas tecnologías están ahí y la formación online es hoy día
una opción completamente normal. Tienes cursos online para hacer como y donde
quieras. O mejor, profesores online nativos con los que hablar por Skype o qué
sé yo. Hay mil formas. Puedes buscar un curso aquí.
Evidentemente una inmersión lingüística trabajando en el
extranjero es una experiencia mucho mejor que una carrera a estudiar para trabajar en España. Al
menos a nivel de enseñanza sobre la vida y como vivencia personal, aporta mucho
más y te hace ver las cosas con mucha más perspectiva. Y lo que es más
importante, te hace perder el miedo. Eso sí, a trabajar, no a tirarse un año de
fiesta a cuenta de los padres sin dar un palo al agua o con esas becas de uno o
dos meses de verano para hacer turismo de borrachera.
Y por favor, olvídate de tratar de aprender más gramática de
un idioma extranjero, cuando a buen seguro ni siquiera llegas a eso en tu
propio idioma. El objetivo es el conocimiento de idiomas a nivel funcional.
Conversación informal, comprensión lectora avanzada y saber redactar un texto.
Con eso basta y ya es mucho.
A lo mejor estoy pidiendo demasiado y eso que no cabo ni de
empezar. Pero es que si quieres trabajar
en España lo que no puedes hacer es quedarte en casa sentado esperanzo que
el trabajo de tus sueños llame a tu puerta. Eso pasaba cuando el enchufismo y
el amiguismo estaban en máximo apogeo. Que ahora también hay, pero como que con
la crisis ya no sirve ni eso.
Viaja, te dotará de nuevos puntos de vista, conseguirás
alcanzar una mejor percepción del mundo que te rodea y darás el justo valor a
las cosas. En definitiva, te hará más maduro. Se sociable, relaciónate, haz
contactos. Rodearte de gente interesante. Desarrollar habilidades para
enganchar a la gente con tus historias, tienes que conseguir ser capaz de hablar
en público sin sonrojarte ni ponerte nervioso. En algunos es un don innato en
otros un castigo o tortura.
Estudia cosas con visión de futuro que te diferencien. ¿Te
gustan los videojuegos? Aprende programación. Si quieres saber que puedes estudiar para trabajar en España,
sondea las necesidades de la gente a tú alrededor y escucha.
¿Qué esperabas? ¿Qué te dijera lo mismo de siempre? Estudios
sobre finanzas, ciencias de la salud e ingenierías. Y alguna tendencia
innovadora ¿no? Eso es lo que dicen las encuestas y es verdad. Pero tanto si
tienes 20 años como 40 y quieres reinventarte piensa en lo que realmente es
importante.
Se práctico y aléjate de esos idiotas que valoran a las
personas por lo que han estudiado o el puesto que desempeñan, en lugar de por
lo que saben hacer o la valía que tienen como personas. Si quieres trabajar en
España estudia lo que necesitan la gente y a poder ser que tenga algo que ver
con cosas que te gusten.
También te puede interesar:
Publicar un comentario
Participa en la conversación y déjame un comentario.